En el municipio de Zipaquirá, la situación de la Defensa Civil se ha vuelto un tema de gran relevancia y preocupación. Actualmente, esta entidad se enfrenta a un proceso jurídico que ha llevado a la cancelación de su personería jurídica, lo que ha generado incertidumbre sobre su capacidad para responder ante emergencias.
A pesar de estos desafíos, los voluntarios continúan demostrando su compromiso y vocación de servicio, operando con un fuerte sentido de responsabilidad hacia la comunidad. Durante una reciente sesión del concejo, se discutieron los problemas que enfrenta la Defensa Civil, incluyendo la falta de un espacio físico adecuado para almacenar equipos y recibir capacitación.

Los voluntarios han expresado la necesidad urgente de contar con una sede donde puedan operar de manera efectiva, ya que actualmente sus equipos están expuestos a condiciones adversas como polvo y humedad.
El Secretario de Seguridad del municipio, junto con el alcalde Fabián Rojas, ha manifestado su apoyo a la Defensa Civil y ha indicado que se están buscando soluciones para ayudar a la entidad. Sin embargo, existen pleitos pendientes que complican la situación, incluyendo un proceso en la Contraloría de Cundinamarca relacionado con recursos económicos y un incumplimiento por parte de la compañía de seguros que afecta directamente a la financiación de la Defensa Civil.
A pesar de la falta de recursos y la incertidumbre jurídica, los voluntarios de la Defensa Civil han reafirmado su compromiso de seguir prestando servicios a la comunidad. “Aunque no tenemos la retribución económica, nuestra vocación de servicio nos impulsa a seguir adelante”, Lorena Algarra, coordinadora del comite de Defensa Civil Zipaquirá.

El concejo en pleno, aprobo la creación de una comisión accidental para hacer seguimiento a la recuperación de la personería jurídica es un paso positivo, aunque aún no se ha definido un procedimiento claro para avanzar en este aspecto.
La comunidad de Zipaquirá espera que las autoridades competentes tomen en cuenta las solicitudes para la restitución de la personería jurídica de la Defensa Civil, lo que permitiría a esta entidad operar con mayor eficacia y garantizar la seguridad de los ciudadanos en situaciones de emergencia.

La colaboración entre la administración municipal y los voluntarios es crucial para superar este impasse y asegurar que la Defensa Civil pueda continuar su labor vital en la región. En conclusión, la Defensa Civil de Zipaquirá se encuentra en un momento crítico, donde la voluntad de sus voluntarios y el apoyo de la administración municipal son fundamentales para enfrentar los desafíos actuales. La comunidad confía en que, con esfuerzo conjunto, se logrará restablecer la personería jurídica y mejorar las condiciones de operación de esta importante entidad de socorro.
